El hinojo es una planta perenne, muy aromática, de hasta 120 cm de altura. Se cosechan las semillas hacia finales de verano, y de manera más ocasional también la raiz y las hojas.
Las semillas de hinojo contienen un aceite esencial rico en anetol, las hojas contienen flavonoides y la raiz, cumarinas.
Es una poderosa planta medicinal que destaca por su fuerza para equilibrar las funciones del sistema digestivo, combate con éxito los trastornos estomacales y las indisposiciones tras una mala digestión, reduce la hinchazón y evita las flatulencias. Por su acción eficaz y su sabor suave, resulta especialmente indicada para administrar a niños y bebés aquejados de molestias intestinales, cólicos, o para estimularles el apetito.
Para aprovechar sus virtudes carminativas, se aconseja la fórmula mixta que se prepara combinando semillas de hinojo con otras plantas como anís verde, alcaravea, cilantro y anís estrellado, hervidas en agua durante tres minutos.
El hinojo es también un buen recurso para combatir el estreñimiento y favorecer la eliminación de líquidos. Purifica las vías urinaria, impulsando la eliminación del toxinas y evitando la aparición de infecciones, en este caso combinado con cola de caballo, diente de león, melisa y abedul.
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